Con Chili tuvimos ya la suerte/bendición de haber estado anteriormente en Cancún y la Riviera Maya en hoteles All Inclusive. Para quienes no hayan ido jamás, los hoteles de esta modalidad en la zona ofrecen lo siguiente (con variaciones en el menú e instalaciones):
- Desayuno, almuerzo, cena, merienda, colación, media mañana, picadas para cuando estás tomando. Todo lo que quieras comer. A todas horas.
- Bebidas, con y sin alcohol. A todas horas 🙂
- Ambiente farrístico en mayor o menor medida según el hotel donde estés (los hay más familiares y más quilomberos).
- Las INCREÍBLES playas de la península de Yucatán, con toda la arena que quieras para que se te meta por todos lados, temperatura ideal para chapuzonear, olas para jugar y ausencia de tiburones masticagente.
- Piletas para quien no quiera o no tenga ganas de meterse al mar en ese momento.
- Si un día no querés solamente rascarte la panza (entiéndase tomar como cosaco), hay tour operadores en los hoteles con paquetes para hacer DE TODO: bañarte con delfines, bailar en discotecas gigantescas, ir a pasear a islas como Cozumel o Isla Mujeres, hacer snorkel en zonas de corales, pescar en alta mar, nambrena luego, no hay lo que no hay. Los precios varían según la actividad evidentemente.
- Por último, la habitación, claro.
Básicamente de esto se tratan los All Inclusive
Ir a un All Inclusive en Cancún o la Riviera Maya (o en cualquier lado, creo) es GENIAL, lo recontra recomendamos, especialmente si van con amigos buena onda.
Esta manera de viajar a México es la más “popular”, digamos, entre las agencias de viajes en Paraguay y siempre hay un montón de promociones…
Viajar al mismo sitio, fuera de uno de estos super hoteles y con onda mochilero es… diferente.
Y también es GENIAL!
Chili y Joseto resolviendo sus problemas a punta de pistola!
Playa del Carmen de mochila
Lo primero que quiero decir es que Playa del Carmen no te invita a pasar vacaciones ahí… te invita a VIVIR AHÍ. La onda pachá… los precios… las vistas y la playa… la onda fiestera… la comida… Es una ciudad, mega turística y al mismo tiempo agradable y barata. Estar en Playa del Carmen tiene lo mejor de los dos mundos, como si comieses un mega asadacho con birra y, en vez de darte colesterol ere erea, te curase todos los males. Todo se encuentra a distancia de a pie, o en casos extremos, a distancia de un taxi barato (si sabés cuales tomar y charlás con los choferes para conseguir buen precio).
A punto de degustar un taco en un carrito en la calle. Le ponen una bolsa al plato para no lavarlo! Que vivos. La concentración del comensal es tan solo superada por su astuta mirada
Nos esperábamos un pueblo… nos encontramos con una ciudad. Supermercados, mercados, restaurantes y hoteles y piezas de alquiler y departamentos esparcidos como hongos (de TODOS los gustos y precios), tiendas de souvenirs a patadas, discotecas e incluso un par de shoppings. Se que suena muy “cargado”, PORQUE LO ES!, pero a pesar de los cientos de turistas como nosotros creo que mantiene mucha… mejicaneidad (?). Tacos, salbutes, helados de piña con chile y elotes con manteca y limón… El acentito y los chistes… La sonrisa de Cantinflas pintada en cada persona con la que charlás, para vos, sencilla y sincera… No hay nada que hacer, los lugareños tienen buena onda a prueba de balas.
Playa del Carmen es simpática, cómoda y… no digo linda porque bueno, no es laaaaa ciudad linda, pero tiene ese noseque que queseyo que nos conquistó.
No nos quedamos en ningún hotel, sino en dos departamentos distintos con Airbnb, ambos a buen precio y comodidades, en el mismísimo centro de la ciudad.
Mural con el que nos encontramos en la municipalidad de Playa del Carmen. Ojalá dejen más paredes para ser utilizadas por artistas…
Como moverse: los micritos de Cancún a Tulum
Existen varias empresas de buses que hacen el recorrido Cancún – Playa del Carmen – Tulum. Estos micritos son la 8va maravilla del mundo y humillan a cualquier sistema de transporte público de este planeta. Funcionan así:
- Los podés tomar al estilo Paraguay, en cualquier lugar de su recorrido siempre y cuando les sea “cómodo/seguro” parar a levantarte y tengan lugar para vos.
- Hay más o menos 50 millones de combis, o eso es lo que yo calculé, porque aparecen aproximadamente cada 2 minutos, pero muchas andan llenas y no paran.
- Existe una autopista que une Cancún con Playa del Carmen y Tulum, que va paralela al mar. Los micritos se mueven a grandes velocidades (como todos los vehículos) sobre la misma, en ambos sentidos.
- Son como esas combis de los shuttles, pero más reventadas. El 90% tiene aire acondicionado, o sea que de cada 10 veces que te subís, una vas a pasar calor.
- Cuando te subís, le decís al chofer donde te querés bajar, el tipo te hace alguna señal de al pelo! o dale! y ya te vas. Como esos mozos genios que no necesitan anotar nada, se acuerda de todos los destinos que le dijeron los pasajeros y va parando acorde a lo solicitado.
- El costo varía según lo largo del recorrido, variando más o menos entre 0,5$ hasta 2,5$ (pero si hacés Cancún – Tulum, hacés “transbordo” en Playa del Carmen y pagás dos veces). El chofer te cobra cuando te bajás, se acuerda (no sé como) donde te subiste y aplica algún tipo de fórmula rara (tienen una planilla) para decirte cuanto es.
Ahí están los micritos, alineados como soldados, listos para llevarte a todos lados, con sus cuatro costados y sus choferes arropados, correctamente estacionados… (puedo seguir, pero Chili no me deja)
Quienes usan estas combis? Todos los mexicanos que trabajan en todos los hoteles y parques y demás atracciones turísticas o quienes viven por ahí. Es por eso que es tan barato, no pagás precio de turista.
Son cómodas? Son re comodas, pero a veces esperas un poquitito si el chofer cree que hay chances de llenar su combi, se queeeeeda esperando a que venga más gente.
Por que es importante esto? Para que lo escribís acá en Roguatata? Porque es la manera más sencilla, rápida y costoeficiente de moverte a lo largo de la autopista mencionada y llegar a la mayoría de los puntos de interés sin contratar tours o taxis. La única excepción, el aeropuerto. Para el aeropuerto vayan en ADO (compañía de buses grandes) y listo.
Caminando a tomar las combis, podés hacer una parada obligatoria en una de las “Paletería y Nevería la Flor de Michoacán” y comprar unas paletas de sabor piña con chili y oreo
Lo primero que hicimos: Xcacel y Xcacelito
Chili me dice: “Mirá hay un cenote re lindo cerca de una playa paradisíaca, se llama Xcacel, vamos pues!”. Evidentemente, como buen esposo le dije: “Que cuernos es un cenote??? Se llama Escacequeque? Que lo que decís? Ya estás tomando tan temprano? Invitá pues!”
Se trata de una playa que tiene un cenotecito. Fuimos primero al cenote. Fue la primera vez que vi un cenote, que me metí en uno de esos miniparaisos en la tierra.
Los pecesitos.
El agua.
El fondo.
La trasparencia.
La temperatura.
La compañia. 🙂
Joseto sumergiendose con la gracia de un bulldog para buscar los aritos de Chili que se habían caido unos 5 o 6 metros, al fondo del cenote. Se ve TODO. Así de cristalina es el agua.
Esta es la definición de Cenote: Pozo o estanque natural de agua dulce abastecido por un río subterráneo que se forma en numerosos lugares de la península de Yucatán por la erosión de los suelos, y al que los mayas dieron un uso sagrado.
O sea, son unas piletas naturales, ya sea subterraneas, al aire libre o miti-miti que se encuentran por ahí y que los mayas usaban tanto para tomar agua como para hacer sacrificios humanos y otras cosas (como bañarse y jugar Marco Polo me imagino).
Había sido… hay más de 2.400 cenotes repartidos por toda la península de Yucatán!! Como dije antes, nunca había estado en uno, y utilizando la expresión española: flipé! Me volví loco. Me encantó. Me sentía como en esas películas donde una pareja de apuestos jóvenes descubre esa mini laguna con su cascadita en medio del bosque y se meten a nadar solos con ninguna persona a la vista. Así me sentí. Imaginensé el poder mágico del Xcacelito porque no había ninguna cascadita ni nada de eso, se trataba más bien de una especie de baldío gigante y no de un bosque, y había como 25 turistas además de nosotros, niños quilomberos incluidos. Magia cenotistica!
Intento fallido de sacar una selfie bajo el agua gritando algo coordinado como “Whiskyyyy!”. No apunté tan bien
Este cenote se llama Xcacelito (y es el mejor del mundo), al mismo solo se puede pasar por una media hora aproximadamente, porque como es pequeñito (unos 20 o 25 metros de largo por 12 de ancho), la gente entra en grupos. A veces, lo bueno si es breve, es doblemente bueno!
Antes de entrar tenés que sacarte toda la arena de los pies, te piden por favor que no te pongas ningún repelente ni que te hayas puesto crema hace menos de una hora para mantenerlo “puro”, lo cual es una excelente intención… pero no pueden controlar un cuerno de lo anterior en realidad.
Lo mejor: la mayoría de las personas no se metieron, creo que por miedo o porque pensaron que estaba muy fría el agua… entonces solo unos cuantos escogidos tuvimos ese miniparaíso toditito para nosotros.
Playa Xcacel un domingo. La distorsión del centro es una gota de mar. La pusimos apropósito, no por nabos, para que la foto tenga un elemento acuoso. Bueno, fue por nabos, pero no tenemos una mejor foto de la playa :{
La playa de Xcacel es una playa mega recontra desconocida, fuimos un domingo a la mañana y había poca gente! Lo más raro fue que NO TENÍA OLAS Y ERA PLAYÍSIMA! Era como una piscina con arena blanca blanca de agua de mar (?).
Pensé que me iba a reaburrir porque no podría jugar con las olas, pero la pasamos súper con Chili, flotando como troncos y jugando dentro del agua. La playa es hermosa. Es rara. Tiene el cenote Xcacelito. En fin, está buenísima! (ah, y cuesta 1$ la entrada).
Para observar: La profundidad (o playidad) de la playa, el color blanco de la arena, la transparencia del agua, la temperatura ideal, la mejor compañia. Ah y mirenle a la payasa de Chili intentando meditar bajo el agua también 😛
Agua deliciosa y encuentros cercanos del 3er tipo: Cenote Azul y Akumal
Yo pensaba que el cenote Xcacelito era el mejor del mundo, le estuve diciendo a Chili: “Amor, quiero hacerme un tatuaje en el pecho que diga EL CENOTE XCACELITO ES EL MEJOR DEL MUNDO!!”. Por suerte Chili no me dejó, porque después conocimos el Cenote Azul, que es el mejor del mundo.
El Cenote Azul es un “cenote privado”, digamos, pues te cobran entrada para entrar (valga la re redundancia): 4,20$ por persona.
Una parte del Cenote Azul, es mucho más grande, lleno de peces y mini cuevas. Arriba se puede ver la plataforma perfecta para saltar al agua (caida de unos 4 o 5 metros)
Es mucho más “turístico”, pero eso no le saca nada de su belleza natural, aunque puede que en temporadas altas esto ya sea un tema más pesado. Lo mejor: tiene una roca alta desde donde uno puede desplegar su talento infantil haciendo clavados/saltobomba/vueltacarnero/depanza/geronimo!, etc.
El popular Salto Bomba!
Después de un par de horas nadando, tomando sol, anhelando una cerveza (no podés beber ahí), haciendo saltos vergonzosos y en general rascándonos la panza fuimos a Akumal (a 10 minutos de distancia en las super combis).
Akumal es una playa pequeña, pero para ser tan chica bastante desarrollada: con unos cuantos hoteles, restaurantes, vendedores de tours y locales para comer. Que tiene de especial? Por que unos cuantos empresarios invirtieron en esta micro playa?
TIENE TORTUGAS! MUCHAS TORTUGAS! HERMOSAS TORTUGAS!
Equipados y listos para el avistamiento de tortugas. Haciendole “al pelo” a uds los lectores de Roguatata, a la Vida y a las Tortuguitas que andaban por ahí
Por alguna razón en este sitio en particular crecen unas algas que por lo visto les fascinan a las enormes tortugas verdes de 200 kg que habíamos visto deshovar en Costa Rica. Debido a esto, durante la caminata a la playa por lo menos te invaden unos 5 tour-operadores que desean venderte la “experiencia tortuga” a distintos costos, con guía, equipo de snorkel y tortuga garantizada.
Lo más barato es rechazar todo lo que te ofrecen, caminar al Akumal Dive Center y tan solo alquilar el equipo de snorkel (que incluye el chaleco) por 10$ e ir a buscar tortugas por tu cuenta, sin guías ni nada de esas patrañas. El resultado: observar cientos de pecesitos y no tan “itos”, calamarsitos, pequeños corales… hasta que aparecen ELLAS, LAS TORTUGOTAS!
Nadan con la gracia de un luchador de sumo, comen sus alguitas como vaquitas en una pastura, te miran con la indiferencia de una estrella de Hollywood. Son preciosas.
Aunque no lo parece… esa tortuga pesa unos 200 kg y mide 1,5 metros de largo! (disculpen si es más grande la foto, pero si la achico no se le ven sus manchitas a la gorda)
Nosotros ya las habíamos visto poner sus huevos en la misma playa donde habían nacido, ahora las estábamos viendo en su día a día… Con Chili no cabíamos dentro nuestro de felicidad. No entiendo aún como algo tan simple como ver una @&#@^* tortuga nadando por ahí y comiendo y tortugueando como si nada nos pudo poner tan felices (nos reíamos como estúpidos), pero bueno, lo hizo.
Por último, la playa de Akumal, más allá de las tortugas, vale la pena conocerla y está bien equipada como para pasarse “haciendo playa” como se suele decir.
Lo último antes de ir a Cuba: la ciudad de Valladolid
Se trata de una pequeña ciudad con mucha historia en el corazón de la península de Yucatán, la misma se encuentra cerca de las ruinas de Chichen Itzá y Ek Balam. Fue fundada hace unos 450 años por los españoles sobre las ruinas de la ciudad maya de Zací.
Nosotros nos pasamos el día caminando por la ciudad y resaltamos lo siguiente:
El Cenote Zací, que es fascinante por varias razones:
- Se encuentra en el mismísimo centro de la ciudad
- Es ENORME
- Tiene una forma medio rara, la mitad del cenote está dentro de una cueva gigantesca (estalactitas y estalagmitas incluídas) y la otra mitad fuera.
Cenote Zací. La miniatura hacia el medio es un paraguayo haciendo la pose de Rocky
- Podés saltar al agua desde TODOS sus bordes, salvo lo más alto de la cueva (una caida de unos 40 metros). Este salto se prohibió a quienes no son clavadistas profesionales (no se como se demuestra esto, pero bue…). Igual podés saltar desde distintas alturas, arrancando con saltitos de unos pocos centímetros hasta caídas de unos 20 metros.
- El Cenote Zací tiene “presencia” o quizás personalidad, si eso fuese posible en un cenote. El agua parece negra como la noche y aparenta no tener fondo, una entrada al mismísimo Centro de la Tierra. Te sentís frente a la boca de un gusano de Dune o que estás mirando a los ojos a un Titán griego… Evoca fuerza, primitividad. No creo que nadie pueda verlo y no sentir “algo” la primera vez que lo ve.
- Los primeros minutos de nadar en ese cenote son tanto un placer para los sentidos como un desafío para tu instinto de supervivencia.
- Es el mejor cenote del mundo.
No se cuantos metros 🙂
El museo San Roque: pequeñisimo y gratuíto, los encargados parece que se ponen muy contentos cuando aparece alguien pues te dan un tour de hora y poco.
El parque central (Francisco Cantón): sería la plaza de armas, que tiene una arquitectura particular, un poco recargada en su estilo para mi gusto.
El Ex Convento San Bernardino de la Siena: un edificio donde se puede sentir el silencio, con sus muros de 60 cm de ancho la paz dentro del lugar te invita a cerrar la boca, cerrar los ojos, mirar adentro (quizás suena vairo… pero no deja de ser verdad).
Claro que es pacífico ahora que ya no hay nadie adentro, no me imagino el quilombo que habrá sido con decenas de sacerdotes y mayas siendo evangelisalvados (¿). Digno de visitar.
Patio interno del convento. El silencio es fijo ahí, como un pilar más, como un mueble más
El Amigo Casiano: un restaurante en un mercado donde comimos como reyes a precio de Mercado de Abasto. Creo que es de lo mejor que comimos en México y le pelea sin problemas a los menús de los All Inclusive! Si van, pidan la “Sopa de lima” y la “Cochinilla”. Digan que vienen de nuestra parte.
Casiano está sentado ahí al costado a la derecha, bigote incluído
Por ultimísimo, lo que hicimos con Mamá (Clara Rosa) y Tía Meche
A pesar de que esto fue lo primero que hicimos en México, lo pongo en último lugar porque tiene más bien mucho de “familiar” y poco de “mochilero alejado del mundo y en particular de su mamá y tía”. Quienes no quieran enterarse de esto y quedarse con la parte “mochilera”, puede dejar de leer AHORA este post 🙂
Todo el objetivo de nuestro “pie en el acelerador” los últimos días de Guatemala fue encontrarnos con mi mamá y mi tía Meche en México. Pasamos 3 días juntos, durante los cuales hicimos lo siguiente:
- Ir a la isla de Cozumel a comer, ir a la playa, tomar helado, ser mimados por la vieja, etc, etc
- Ir dos días al Hard Rock Café Riviera Maya, con pases del día a… pasar el día (entiendase tomar como bichos recién ingresados a la facultad de Medicina de la UNA en su bautismo) y ser mimados por la vieja.
Vista desde Cozumel, en esta parte de la isla había barcos y botecitos pesqueros, estábamos un poco alejados de los muelles con los cruceros
Que tal la isla de Cozumel? NO la recomendamos. La sentimos como que nos vendieron un asadito de la esquina del Defensores (carne de dudosa procedencia – grasa – carne de dudosa procedencia – grasa) a precio de un ojo de bife en Tierra Colorada. O sea… no es que sea fea la isla ni nada de eso (nadie dice que el asadito en la cancha no sea rico), pero si como que te vendieron gato por liebre, te dijeron “te voy a presentar una chica lindísima” y te encontraste con Cuasimodo con peluca.
La isla es un compilado de tiendas y restaurantes (caros), algunos bares (caros) y sitios de venta de souvenirs (caros). En la misma se puede hacer snorkel y también se puede recorrer la isla con una moto o auto alquilado para llegar a playas con poca gente (que es lo que hicimos). Las playas de la isla son preciosas, en particular las que encontrás al alejarte del pueblo. Aunque da un poco de miedo meterse mucho pues las corrientes son fuertes y como son desiertas no hay salvavidas (!).
Por que es tan famosa/cara? Todos los días hay uno o más cruceros anclados en sus muelles. He ahí la explicación. Quien pagó un crucero baja del barcote y se encuentra con una hermosa isla que recorrer… a precios de crucero.
Lo otro que hicimos fue encallar en las piscinas del Hard Rock por dos días y tomar y comer como si fuésemos a empezar la dieta el lunes. Charlamos, nos matamos de risa y básicamente disfrutamos sencillamente de vernos y estar juntos. Fue LO MÁXIMO.
Aprovecho este canal para agradecer a Clara Rosa que nos haya invitado a pasar esos días en el hotel: Gracias Ma! La pasamos GENIAL!
Último abrazo con Clara Rosa antes de seguir viaje. Chulina la vieja!
Finalmente, a quien le guste la idea de moverse un poco en sus vacaciones y no gastar tanto, creemos que este es uno de esos sitios ideales.
La receta sería así:
- Conseguir un pasaje barato hasta Cancún
- Rentar un Airbnb en Playa del Carmen
- Llegar a Cancún y tomarse un micro ADO hasta Playa del Carmen
- Quedarte ahí feliz de la vida y/o recorrer cenotes, playas, parques, ruinas, ya sea por tu cuenta (las combis son fundamentales) o contratando tours (que hay a patadas)
- Tomarte un micro ADO para ir al aeropuerto de Cancun y volver a Paraguay
- Sentirte revivo porque estuviste en un paraíso a una porción del costo 🙂
Una de las 1.283.383.907 taquerías que vimos. Nadie jode con Billy The Kid y sus tacos! Nadie!!
Gracias por leer el post, si querés comentar algo podés hacerlo más abajo :)